martes, 21 de junio de 2011

.. clozapine



No toleraba los neurolépticos. Así pues, le recetaron clozapina. Y al instante tuvo que sostenerse en las blancas paredes de su habitación, evitando que sus piernas temblorosas cedieran al peso de ese cuerpo que jamás fue del todo suyo. Recorrió con la mirada todas aquellas pastillas que descansaban en el cajón abierto, cada una de las que su garganta se había resistido a tragar, siendo consciente de que ninguna de ellas pudiera haber hecho su efecto. ¿Por qué iban a hacerlo? Él no tenía ningún problema. No estaba enfermo, a pesar de lo que los médicos se empeñaban en afirmar. Sin embargo, seis meses después del tratamiento, se encontraba mejor. No había sufrido ninguno de esos raras reacciones pseudoparkisonianas.

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