.. in the library

Donde las historias se perdían entre el polvo y el silencio, donde comenzaban las aventuras y terminaban los viajes, donde la realidad se volvía un poco menos real y un poco más irreal. Donde fluían las sensaciones, perdiéndose entre páginas, leyendo entre líneas los recuerdos, la mente, los momentos. Donde nada era imposible, y todo lo imposible se aferraba con insistencia a nuestro aliento, que lo hacía sencillo, que henchía de expectación nuestras sospechas, nuestros miedos, nuestras esperanzas. El único lugar donde realmente pudimos sentirnos vivos, donde moría el dolor del tiempo y nacía el amor por las quimeras.