.. the slow house trailer

Despacio. Así es como llegó a su destino, despacio. Recorrió sus caminos con paciencia, sin prisas, soportando huracanes y olas de calor, cargando siempre sobre sus hombros el peso de toda su experiencia. Miraba atrás a menudo, pero nunca retrocedía. Aunque tenía miedo a las consecuencias de sus decisiones, al futuro, a posibles abismos unos pasos más allá, siempre seguía avanzando. Era difícil ver su rostro sin una sonrisa, con la que se protegía de las adversidades. En ocasiones no podía evitar derrumbarse, detenerse a descansar, a pensar, a reflexionar sobre lo que hacía, sobre lo correcto, lo que le dictaba su corazón y lo que creía que debía hacer. Pero siempre continuaba su marcha. No se permitía rendirse, echar a perder el esfuerzo de años en un instante de incertidumbre. Superaba los retos que se le imponían con esfuerzo, pero con satisfacción. A menudo, quien pasaba a su alrededor le recordaba lo arduo que era realmente su camino y, lejos de animarlo a continuar, lo instaban a abandonar su lucha. Sin embargo, él deseaba aquello que perseguía. Y lo deseaba con tanta fuerza, que realmente daba igual si merecía la pena llegar hasta el final o no. Sólo quería hacerlo, soñaba con hacerlo. E iba a hacerlo, costara lo que costase. Sabía que, de alguna manera, sólo por eso, iba a merecer la pena. Tal vez el final no fuera útil, pero el camino le habría aportado tanto que la meta había dejado de ser importante. Aquel camino sería su vida, y sólo el valor de vivirla sería su mayor recompensa.